Los pacientes que padecen una hemiplejia o hemiparesia (parálisis total o parcial de un hemicuerpo) sufren alteraciones del equilibrio y la estabilidad, tienen pérdida de fuerza corporal en mayor o menor grado en el hemicuerpo afecto, así como pérdida de flexibilidad debido a alteraciones del tono muscular.
Todo esto afecta de una forma muy directa a la marcha y compromete su independencia funcional.
Es por ello que abordar todos estos aspectos en el proceso rehabilitador es clave para su recuperación.
El TRX o “suspensión training”
El TRX o “suspensión training” es un sistema de entrenamiento en suspensión muy versátil que permite adaptarse a cualquier condición física con multitud de ejercicios, tanto para miembros superiores, miembros inferiores o tórax y abdomen. El único material necesario consiste en unas correas ancladas con unas hebillas regulables en altura y dos agarres para manos o pies.
Cada ejercicio realizado con TRX:
- desarrolla la fuerza funcional,
- a la vez que permite mejorar el equilibrio,
- la flexibilidad y
- la estabilidad central del cuerpo (core)
A su vez reduce el riesgo de lesiones al trabajar con el propio peso corporal y poder con ello adaptar la intensidad a la persona.
El trabajo en suspensión proporciona una situación de desestabilización, lo que exige al cuerpo una conciencia corporal para permitir que el tronco y otros estabilizadores articulares mantengan el centro de gravedad dentro de su base de apoyo. A medida que mejora la estabilidad permite aumentar la dificultad de los ejercicios y la exigencia de éstos.
Ésta demanda de estabilidad genera una activación muscular competa y una estabilización articular con un trabajo de propiocepción.
¿Qué es el core?
Por core nos referimos al centro de gravedad del cuerpo, que hace de enlace entre el tren inferior y el tren superior y que permite una correcta estabilización lumbo-pélvica, y que por lo tanto resulta indispensable para desarrollar el equilibrio, la estabilidad y la coordinación.
Por lo tanto, enriquecer la rehabilitación de estas patologías incluyendo en ella el entrenamiento con suspensión permite trabajar de una forma muy directa e individualizada el equilibrio, la coordinación y la estabilidad central, a la vez que trabajamos fuerza y flexibilidad con su propio peso corporal y pudiendo variar la intensidad en función del paciente y los objetivos a trabajar.
Otro aspecto positivo y no menos importante es la satisfacción y superación personal que sufre el paciente al verse capaz de adaptar éste sistema tan de moda y con tan buenos resultados a su rutina rehabilitadora.
Área de Fisioterapia del Instituto de Rehabilitación Neurológica – IRENEA VITHAS Valencia al Mar.