La relación entre la contaminación atmosférica y el ictus es un tema cada vez más estudiado, dado su impacto significativo en la salud pública. Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), la contaminación del aire es un factor de riesgo emergente para el desarrollo de ictus, que es la primera causa de discapacidad adquirida en adultos y la segunda causa de muerte en España.
La evidencia científica detrás de la conexión
Un reciente metaanálisis global publicado en Environmental Health Perspectives revisó datos de más de 6 millones de casos en 28 países, confirmando que el aumento de partículas contaminantes como el PM2.5, NO2 y el ozono está asociado a:
- Incremento en los ingresos hospitalarios por ictus.
- Mayor mortalidad por ictus en los días con niveles elevados de contaminación.
Este análisis subraya que el riesgo de ictus crece de forma proporcional al aumento en las concentraciones de contaminantes en el aire. Según el informe, incluso exposiciones a corto plazo (días con alta contaminación) pueden desencadenar eventos cerebrovasculares, particularmente en personas con factores de riesgo preexistentes como hipertensión, diabetes o enfermedades cardiovasculares.
De hecho, un estudio reciente publicado en Current Opinion in Neurology titulado «Current trend in air pollution exposure and stroke» proporciona una visión actualizada sobre cómo la exposición a la contaminación del aire influye en la incidencia de ictus.
Este estudio destaca que:
- Exposición a corto plazo: existen incrementos en los niveles de PM2.5 y NO2 asociados con un aumento en las hospitalizaciones por ictus isquémico
- Exposición a largo plazo: la exposición prolongada a contaminantes como PM2.5 se correlaciona con un mayor riesgo de ictus hemorrágico, lo que sugiere que los efectos adversos de la contaminación pueden acumularse con el tiempo
Estos hallazgos refuerzan la necesidad de monitorizar y controlar los niveles de contaminación para prevenir eventos cerebrovasculares.
Mecanismos fisiológicos de daño
La contaminación del aire afecta la salud cerebrovascular a través de múltiples mecanismos:
- Inflamación sistémica: las partículas finas (PM2.5) ingresan al sistema respiratorio, desencadenando una respuesta inflamatoria que afecta la microcirculación cerebral.
- Estrés oxidativo: los contaminantes generan un exceso de radicales libres que dañan las células endoteliales, esenciales para la salud vascular.
- Disfunción endotelial: esto aumenta la probabilidad de formación de trombos y disminuye la capacidad del sistema circulatorio para regular el flujo sanguíneo.
Un estudio de la American Heart Association publicado en Stroke sugiere que estos mecanismos también pueden acelerar la progresión de la aterosclerosis, un factor clave en el ictus isquémico.
Impacto en España
En España, las principales ciudades experimentan niveles de contaminación atmosférica que superan los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), especialmente en áreas urbanas densamente pobladas. Según datos del Informe de Evaluación de la Calidad del Aire 2023 del Ministerio para la Transición Ecológica, las partículas finas y el dióxido de nitrógeno están entre los contaminantes más preocupantes.
Esto tiene implicaciones graves, dado que el ictus afecta a más de 120.000 personas al año en España, y la contaminación del aire podría ser un factor subestimado en esta estadística.
Por ello, concluimos que la contaminación del aire es un factor de riesgo prevenible para el ictus, ya que la evidencia científica es clara: reducir los niveles de contaminantes puede salvar vidas y mejorar la calidad de vida de las personas. Y, en el contexto de España, esto cobra especial relevancia, dado el número creciente de casos de ictus y la contaminación en áreas urbanas.
Referencias bibliográficas
- Boehme, A. K., Esenwa, C., & Elkind, M. S. V. (2017). Stroke Risk Factors, Genetics, and Prevention. Circulation Research, 120(3), 472–495.
- Liu, H., Tian, Y., Xiang, X., et al. (2019). Ambient Particulate Matter Concentrations and Hospital Admissions Due to Stroke in 26 of China’s Largest Cities: A Case-Crossover Study. Environmental Health Perspectives, 127(5).
- World Health Organization. (2021). Global Air Quality Guidelines. Ginebra: OMS.
- Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. (2023). Informe de Evaluación de la Calidad del Aire en España.
- American Heart Association. (2019). Air Pollution and Cardiovascular Disease: A Statement for Healthcare Professionals. Stroke.
- Current trend in air pollution exposure and stroke