Hoy tenemos una historia «en primera persona» muy especial, todo un ejemplo de superación, uno de nuestros paciente del Servicio de Daño Cerebral, David López, nos ha querido contar su historia desde que hace 5 años sufrió un accidente de moto que le dejó en coma, hasta ahora que ha realizado su primer triatlón de larga distancia.
Me llamo David López, en noviembre del 2008 tuve un accidente por el que estuve en coma unos 14 días.
Bueno, todos creemos saber lo que esto supone, pero no es así. Pensamos que la persona esta “dormida” hasta que mágicamente despierta. Pero esto, por desgracia, no es así. Después de haber tenido un traumatismo cráneoencefálico y por tanto un daño cerebral, cuando despiertas no eres la misma persona.
No podía hablar, no podía comer, no podía caminar, ni mantenerme en pie, no recordaba, ni recuerdo, muchas cosas y por supuesto, todo esto lo sé porque me lo han contado, porque yo no recuerdo nada.
Tuve “suerte” porque de las lesiones físicas me cure pronto, únicamente la vista del ojo izquierdo ha quedado algo dañada y de las neurológicas y psicológicas también me he recuperado enormemente pero todavía tengo algunos “despistes” que supero llevando mi agenda y apuntándolo todo y me pasa todavía que pierdo un poco los nervios o me río aunque el chiste sea malo.
Mis padres, como es lógico, se preocuparon mucho y tras averiguar que el Hospital Valencia al Mar era de los mejores de España en el tratamiento del daño cerebral me ingresaron él.
Tras el ingreso hicieron las gestiones con sanidad, pero lo importante era empezar cuanto antes el tratamiento, así les comentaron muchos médicos.
Durante unos meses se que iba a rehabilitación mañanas y tarde y estuve ingresado, luego me dejaron irme a casa pero seguía haciendo rehabilitación por las mañanas y por las tardes.
Al principio lo tienes que aprender todo, eres como un “bebe”, comes papillas, no sabes andar, no puedes ducharte solo, no puedes hablar, no recuerdas cosas que has hecho apenas una o dos horas antes, etc.
A parte de ir al hospital, mis padres contrataron a una físico que al principio venia a casa tres o cuatro días por semana y luego, cuando ya podía valerme mejor solía venir un par de días por semana.
Después de este primer año, pase a ir únicamente por las tardes, y así estuve hasta que me dieron el alta en el 2011.
A parte de ir al hospital por las mañanas, venía a mi casa una neuropsicóloga con la que trabajaba unos tres días por semana.
Total, que entre los deberes del hospital, los que me mandaba mi neuropsicóloga y las clases de gimnasia, no me quedaba mucho tiempo. Fue duro, sobre todo por el cansancio, todo nos cuesta más, pero, hay que obligarse y hacerlo porque nosotros somos los que tenemos que recuperarnos y tenemos que poner todo de nuestra parte.
También estuve yendo por las tardes a mi despacho, me notada muy cansado pero hacia el esfuerzo por ir. A parte de mi trabajo, siempre me ha gustado el deporte, ya corría en ciclodeportistas y practicaba el triatlon.
Me puse en manos de un entrenador, al que le explique mi caso, y me ha servido de ayuda y apoyo porque se ha adaptado bien a mis “características”. He corrido bastantes triatlones, Sprint y Olímpicos sobre todo, hasta que el día 2 de Junio corrí mi primer triatlon LD (1900m natación, 90Km en bicicleta y 21Km corriendo)
Con mi trabajo, sigo evolucionando y pienso cada vez un poco mejor, tengo suerte porque a nivel de “razonamiento” no tengo problemas y comparto mis ideas con mi padre y mi hermana que están en la empresa.
Mi nivel de estudios, tengo carrera y MBA y hablo Ingles, he tenido suerte porque los conceptos fundamentales los mantengo y puedo hablar Ingles, no con la misma soltura pero me puedo “defender”.
En mi trabajo me encargo, ahora, de todas las relaciones internacionales, con mi padre lo comento todo siendo yo el que habla con los clientes y proveedores.
Desde que tengo el alta he viajado tres veces a China y unas 4,5 veces a Egipto, donde tenemos una fabrica a la que antes del accidente solía ir cada mes, mes y medio.
En resumen, todo va volviendo lentamente pero “sin pausa”. Es un camino lento, pero hay que estar decidido a hacerlo y hacer todo el esfuerzo necesario. Como me han dicho, el David de ahora es uno, diferente al de antes. Mi vida comenzó hace 5 años.
Por ultimo, quiero dar las gracias, de nuevo, a todas las enfermeras, médicos, del Hospital Valencia al Mar, que me han ayudado mucho y gracias a ellos, se puede decir, “he vuelto a nacer”.
Un saludo.