La parálisis cerebral infantil es una lesión no evolutiva del sistema nervioso central que puede provocar una alteración del tono muscular y del movimiento que afecta a los niños a nivel cognitivo, social y del lenguaje.
¿Quién tiene parálisis cerebral?
La parálisis cerebral se ha convertido en la causa más frecuente de discapacidad física entre la población infantil. Actualmente podemos hablar de hasta 2,8 personas con parálisis cerebral por cada mil habitantes. Lo que en España nos sitúa con una población estimada de 120.000 personas. Puede afectar a niños y niñas de cualquier raza y condición social.
¿Cuáles son las causas?
Las lesiones que provocan parálisis cerebral suceden durante la gestación, el parto o los primeros años de vida. Las causas pueden ser:
– Prenatales: infecciones intrauterinas (especialmente virales), las intoxicaciones (sustancias tóxicas, medicamentosas), exposición a radiaciones, etc.
– Perinatales: la anoxia, la prematuridad, los traumatismos mecánicos del parto y el desprendimiento placentario prematuro.
– Postnatales: incompatibilidad sanguínea, las encefalitis y meningitis, problemas metabólicos, lesiones traumáticas y la ingestión accidental de sustancias tóxicas.
¿Hay otras dificultades asociadas con la parálisis cerebral?
A la parálisis cerebral, generalmente, se asocian problemas de diversa índole. Además de las alteraciones en el tono muscular, la postura y el movimiento, pueden presentar trastornos asociados: visuales (el problema visual más común es el estrabismo), auditivos (son poco frecuentes aunque si el nervio auditivo está afectado, el niño/a puede desarrollar hipoacusia o sordera), cognitivos (dificultades en la atención, concentración, memorización o procesamiento de la información), emocionales (frustración, aislamiento, dificultad en la adaptación social, ansiedad), de percepción espacial (el pequeño/a en ocasiones, no es capaz de relacionar el espacio con su cuerpo) y del lenguaje (pueden ir desde simples dificultades de articulación hasta una imposibilidad total para emitir una palabra comprensible).
¿Cuáles son los principales tipos de parálisis cerebral y como afectan al habla?
La complejidad de la parálisis cerebral y sus efectos varía de una persona a otra. Suele ser difícil clasificar con precisión el tipo de parálisis cerebral que padece un niño. Dicha parálisis puede ser leve, moderada y severa. Algunos de los tipos tradicionalmente considerados como más importantes se determinan por el trastorno neuromotor:
– Parálisis cerebral espástica: Se caracteriza por un aumento exagerado del tono muscular que implica una gran dificultad para mover determinadas partes del cuerpo (según lesión) e incluso en ocasiones la imposibilidad de hacerlo. Un aumento exagerado del tono de los músculos del tórax, de la nuca, el bloqueo de la glotis, de la lengua etc., provocan alteraciones en el habla y en la deglución.
– Parálisis cerebral atetoide: Al contrario que el anterior, éste se caracteriza por los cambios de tono (de hipertonía a hipotonía) y la cantidad de movimientos involuntarios. Este descontrol motor general puede afectar también a los músculos faciales, aparato respiratorio y a la voz. En este caso, las dificultades de articulación son debidas más a problemas de coordinación de movimientos que a la imposibilidad de mover ese órgano como ocurre en los espásticos. Los defectos en la articulación pueden ir desde leves dislalias a la incapacidad total de hablar.
– Parálisis cerebral atáxica: En este caso se observa dificultad para realizar movimientos finos, siendo éstos mal dosificados, mal adaptados, con cierta torpeza. Presentan un lenguaje enlentecido en el sentido de una bradilalia y una bradiartria. La respiración, fonación y articulación se hallan mal coordinadas, lo que provoca que hablen con voz débil y monótona.
– Parálisis cerebral mixta: Es frecuente encontrar una combinación de los síntomas descritos anteriormente, lo que dificulta realizar un diagnóstico preciso.
Para terminar os dejamos una serie de vídeos sobre la parálisis cerebral infantil y experiencias en primera persona. Si necesitas más información sobre este tipo de lesión cerebral, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
