Tumor cerebral infantil: en la actualidad, mayor tasa de supervivencia y secuelas neurológicas rehabilitables

Virgen del consuelo tumor cerebral infantil

Un diagnóstico de cáncer cerebral siempre supone un importante y devastador impacto emocional. Pero, cuando el diagnóstico es de un tumor cerebral infantil, éste aún es más doloroso. Según las cifras actuales, la prevalencia del cáncer en niños con menos de 15 años, ronda en España los 1.500 casos anuales. Pero, ¿cuáles son las secuelas neurológicas rehabilitables tras un tumor cerebral infantil? Respondemos a esta pregunta, a continuación.

El tumor cerebral infantil

En primer lugar, si atendemos al análisis clínico, habitualmente los tumores cerebrales en niños afectan a la fosa posterior del cerebro, al tronco cerebral y/o a la médula espinal. Su tratamiento, frecuentemente, combina cirugía, quimioterapia y radioterapia.

En la actualidad, podemos decir que, gracias a los avances médicos y a la alta especialización de los profesionales, las tasas de supervivencia son cada vez más elevadas. Para determinar esto, los profesionales deben de atender al tamaño, tipo o localización del tumor. Estas variables van a determinar muchas de las alteraciones neurológicas, pero es importante tener en cuenta que no sólo esto las condiciona. De hecho, los tratamientos que se han tenido que administrar y, de forma importante la radioterapia, se sabe que tienen un impacto decisivo sobre las funciones neurológicas, sobre todo en las habilidades cognitivas.

De esta forma podemos dirigir la mirada a otros intangibles. Estaríamos hablando, en este caso del estrés emocional, el absentismo escolar y el apoyo social como factores que también afectan de forma directa a la evolución de estas manifestaciones neurológicas. De hecho, una vez superada la fase aguda, es importante valorar de forma minuciosa y establecer un plan de rehabilitación específica lo antes posible. Así, los profesionales conseguirán abordar las manifestaciones neurológicas que parecen secundarias a todo el proceso, pero que pueden tener repercusión sobre aspectos motores, cognitivos, en el lenguaje, emocionales, etc.

Alteraciones neurológicas tras el tumor cerebral infantil

Servicio de Neurorrehabilitación infantil Hospital Vithas Virgen del Consuelo

Respecto al movimiento, encontramos frecuentemente alteraciones del equilibrio. A estas se le pueden unir movimientos anormales (como temblor o espasmos), debilidad o parálisis de una parte del cuerpo o problemas en la organización o en la eficacia de los movimientos (los niños parecen más torpes, se caen con frecuencia…).

Ahora bien, las alteraciones motoras, aunque son las más evidentes no son las únicas. En este sentido, también puede estar alterada la sensibilidad, la deglución o el lenguaje. De hecho, los problemas emocionales y conductuales pueden aparecer como reacción a todo este proceso vital o ser secundarios a la lesión cerebral en sí misma.

Entre todas las posibles alteraciones tras superar un tumor cerebral cabe señalar los problemas cognitivos. Estos, pueden ser evidentes desde el principio o aparecer varios meses e incluso años después de la lesión. De ahí, la importancia de hacer un seguimiento.

Alteraciones cognitivas

Dentro de estas alteraciones cognitivas, los aspectos que se han visto más afectados habitualmente son:

  1. La velocidad en que procesan la información.
  2. La capacidad de concentrarse o prestar atención.
  3. La memoria más inmediata y la capacidad para organizar o planificar.

De hecho, en varios de los pacientes de IRENEA, hemos constatado el impacto en los resultados académicos en el colegio, directamente relacionado con estas alteraciones.

Así pues, es importante detectar y diseñar un plan de rehabilitación específico de las alteraciones neurológicas después de un tumor cerebral. Como hemos indicado, se sabe que un buen tratamiento puede mejorar la evolución y prevenir algunas alteraciones cognitivas. Con técnicas de neuroimagen, se han visto mejoras en la función del cerebro en relación a avances en las alteraciones neurológicas de los niños después de un tumor cerebral tras seguir programas de neurorrehabilitación personalizados.

Tratamiento del tumor cerebral

Las manifestaciones clínicas después del tratamiento de un tumor cerebral pueden ser múltiples. Las secuelas suelen afectar a varias a esferas de la persona, y pueden presentarse con diferente grado de severidad o en distintas fases del desarrollo del niño. Por ello, lo óptimo es realizar una valoración y un abordaje terapéutico multidisciplinar.

La valoración desde el punto de vista motor, cognitivo, psicológico, emocional, de la nutrición/deglúción y del lenguaje debe realizarse de forma minuciosa y periódica. En el Servicio de Neurorrehabilitación Pediátrica, con los resultados de la valoración en cada momento se diseña un Programa de Tratamiento específicamente dirigido a cada niño. Médicos, neuropsicólogos, fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, nutricionistas y trabajadores sociales: todos trabajan de forma coordinada para atender las necesidades del niño y de su familia; bien sea con intervenciones terapeuticas específicas, o con pautas para las otros profesionales y para las familias.

En el Servicio de Neurorrehabilitación Pediátrica, estos niños/as pueden beneficiarse de dispositivos tecnológicos (como el robot de marcha Lokomat ProV6, entornos de Realidad Virtual para el trabajo del equilibrio, pantallas multitáctiles para abordar problemas cognitivos como las dificultades atencionales o en funciones ejecutivas…), de programas intesivos específicos (como el CIMT, HABIT-ILE etc.), de dispositivos ortopédicos y productos de apoyo etc.

Como la adecuada integración en el entorno doméstico y escolares es fundamental, desde el Servicio siempre se ofrece la posibilidad de contactar con los centros escolares además de con los tutores/padres, para coordinar la intervención y optimizar la evolución del niño/a.

CompÁrtelo:
Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn

Deja un comentario

Quizás te interese TAMBIÉN