Espasticidad

Espasticidad

Tras un daño cerebral adquirido, un síntoma frecuente es la aparición de espasticidad. Es un trastorno motor en el que se produce una contracción involuntaria y persistente de un grupo muscular, asociado a un aumento de la resistencia al estiramiento pasivo del músculo. Es velocidad-dependiente, es decir, va aumentando a medida que aumentamos la velocidad al movilizar el miembro, y suele desarrollarse en las primeras semanas tras una lesión cerebral.

Se trata de un síntoma dinámico, su expresión clínica varía a lo largo del tiempo y en él influyen múltiples factores. Su evolución natural es hacia la cronicidad. El aumento de tono muscular puede provocar rigidez y limitación articular, deformidades y posturas anómalas, lo que conlleva la aparición de dolor y disminución de la capacidad funcional, dificultando el vestido y desvestido, aseo, alimentación, y la deambulación.

La espasticidad no siempre tiene un efecto negativo, cierto grado de espasticidad en extensión del miembro inferior puede ser beneficioso al facilitar las transferencias, la bipedestación o la marcha. En la extremidad superior, es uno de los factores implicados en el desarrollo del síndrome del hombro doloroso en el hemipléjico.

Afecta principalmente a los músculos antigravitatorios, es decir, los que participan en la estabilización de las articulaciones al oponerse a los efectos de la gravedad. Así, los patrones que encontramos más comúnmente son: en el miembro superior el hombro adopta una postura en aducción y rotación interna, con el codo en flexión, antebrazo en pronación y flexión de muñeca.

En el miembro inferior, encontramos la cadera con una tendencia a la flexión y aducción, flexión o extensión de rodilla, con un pie equino varo y dedos en garra.

Para la valoración de la espasticidad, además de la historia clínica y exploración física, disponemos de varias escalas, siendo la más empleada la Escala Ashworth o la Escala de Ashworth modificada. Otras escalas de valoración empleadas son la de Tardieu, de Penn, medidas de función como la escala analógica visual del dolor, test de la marcha de 6 minutos medidas de actividad y participación como la FIM, Barthel o Rankin, escalas de objetivos,…

En el abordaje del paciente espástico es fundamental conocer el tipo de lesión, el tiempo de evolución, los déficits asociados y el grado funcional y de discapacidad. Los objetivos del tratamiento son mejorar la funcionalidad del paciente (las transferencias, la postura, el equilibrio, la marcha…), la calidad de vida (aliviar el dolor, facilitar la higiene, el vestido,…), y prevenir y tratar las complicaciones (contracturas, deformidades,…).

Antes de iniciar el tratamiento es necesario valorar las posibles espinas irritativas que estén aumentando la espasticidad, como pueden ser procesos infecciosos, una fractura, ulceras por presión, temperatura ambiental….

Disponemos de varias alternativas para el tratamiento de la espasticidad. En primer lugar tenemos las terapia física, donde se incluye un posicionamiento adecuado de tronco y extremidades tanto en sedestación como endecúbito, la fisioterapia (existen diversas técnicas pero ninguna ha demostrado ser superior a otra en el tratamiento de la espasticidad), crioterapia/calor, electroterapia

En segundo lugar la farmacología oral, donde el tratamiento de primera línea incluye el baclofeno (Lioresal®), tizanidina y benzodiazepinas, cuyo efecto secundario más limitante es la somnolencia. Otros fármacos empleados son la gabapentina, dantroleno, cannabinoides… En cuanto el tratamiento farmacológico no oral, lo más empleado es el baclofeno intratecal (en pacientes con espasticidad generalizada que no responden a antiespásticos orales a dosis altas) y las inyecciones intramusculares de toxina botulínica para el abordaje de la espasticidad focal (os hablaremos más de ello en otro post). Por último disponemos del tratamiento quirúrgico, con el objetivo de corregir deformidades mediante diversos procedimientos.

Si necesitas más información sobre espasticidad, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

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9 comentarios en «Espasticidad»

  1. Muchas gracias por seguir adelante con este buen blog. Si me permitís, me gustaría comentar e iniciar, a poder ser, un pequeño debate sobre algunas de las afirmaciones que hacéis, puesto que sobre espasticidad, todavía no hay nada que se saque en claro, y todavía se da a mi parecer, material en la universidad un tanto desfasado. (y no lo digo por éste que compartís).
    – Por un lado, afirmar que la espasticidad produce dolor, no estoy de acuerdo. Precisamente una de las características del paciente neurológico es que no sufren dolor, a no ser que haya otras complicaciones de por medio, pero entonces ya no estamos hablando sólo de espasticidad. Quizás podríais plantear la posibilidad de tener dolor en cuanto se realiza una movilización, pero estamos hablando que la produce dicha espasticidad? Entonces, ¿por qué en reposo no duele? A mi me da qué pensar. (ya bastante lo hago en mi blog).
    – Sobre la espasticidad no tiene siempre efecto negativo, el matiz que planteáis para realizar las transferencias, bipe o marcha, me parece correcto, aunque especificaría el riesgo de bloquear la articulación, ya sea para sentirla o simplemente para mantenerse de pie en forma de bloque, puesto que hay una pérdida de control motor en la articulación de la rodilla, con todo lo que ello supone después volver a normalizar su función, y su aprendizaje perjudicial que ello supone. (neuroplasticidad maladaptativa).
    – Por otro lado, espasticidad como componente del síndrome hombro doloroso, me parece muy curioso que en el hombro haya una hipotonía severa, brazo subluxado y resto del miembro con espasticidad. ¿No debería estar todo espástico al completo? ¿Qué opináis? Porque el patrón sinérgico de la musculatura antigravitatoria supongo que incluirá el hombro, ¿no?
    – Sobre el tratamiento, ha quedado un poquito pobre (lo comento de buen rollo, que conste en acta por favor) en cuanto a fisioterapia os referís, quizá electroterapia sin más no tiene los efectos deseados en paciente neurológico, debe estar integrada a la funcionalidad. En cuanto a crioterapia y termoterapia, yo creo que al final deberían estar contraindicadas, y me explico. Si tenemos alteraciones sensoriales, así como una mala calidad del flujo informativo que debe interpretar el cerebro lesionado, quizás estemos equivocados en cuanto aplicación de termo o crio. ¿No creéis que le confundimos más? O tenemos tendencia a pensar en musculatura para que se relaje y así poder movilizar?

    Creo que lo dejo aquí, espero que más gente se anime a participar. Yo todavía no tengo clara la espasticidad, y no me conformo con lo que nos suelen dar en la universidad.
    Saludos!

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    • Muchas gracias David por tus comentarios y reflexiones. Es un placer compartir opiniones con gente con experiencia y apasionada por el daño cerebral. Acerca de lo que comentas:

      Respecto al tema del dolor puede que no hagamos referencia a los mismos conceptos. En cuanto al dolor en pacientes neurológicos hablamos de los síndromes dolorosos propios del paciente post ictus, filiados y reconocidos, esos que todos hemos visto, sufrido, intentado evaluar con escalas específicas para ictus, tratado etc. Entre ellos, encontramos en muchos textos (y en la clínica, claro) como entidad propia el dolor asociado a espasticidad (un ejemplo por si te apetece hojearlo, es el estudio acerca del cuestionario sobre dolor recientemente publicado en Stroke 2013). Como sabemos, el dolor actúa como espina irritativa de la espasticidad y los espasmos, y el abordaje del dolor forma parte muchas del tratamiento antiespástico, por eso también pensamos que es importante hacer mención a él al hablar de espasticidad. Ahora bien, el tema de si el dolor forma parte intrínseca de la fisiopatología de la espasticidad, sucede como consecuencia de que la alteración del tono active nociceptores per se, o es motivado secundariamente por las posturas anómalas que provoca (ocasionando alteración en el apoyo, puntos de presión, heridas cutáneas, atrapamientos nerviosos…), no es a lo que nos referimos en el post. Por otra parte puede ser un interesante tema para revisar y comentar en otra ocasión! 😉

      Estamos completamente de acuerdo en que la espasticidad no tiene por qué ser intrínsecamente negativa y hay que evaluar cuidadosamente cómo la abordamos y si se debe tratar. El trabajo multidisciplinar, como siempre en estos pacientes, es muy importante. Tenemos que considerar y determinar bien los objetivos desde todas las áreas (y por supuesto desde los familiares y el paciente), teniendo en cuenta el proceso de reaprendizaje y su impronta sobre la plasticidad y la ejecución, la situación funcional, la presencia y competencia de compensaciones, etc.

      En cuanto a la espasticidad en el hombro doloroso, yo creo que una situación más o menos habitual puede ser la del hombro fláccido y subluxado en el que despierta espasticidad principalmente sobre los rotadores internos y adductores, pasando a desarrollar la contractura en adducción y rotación interna, asociada a dolor de características mecánicas.

      El apartado del tratamiento ha quedado efectivamente corto, tanto en lo referente a fisioterapia como a otros aspectos. Nuestra intención es que este sea un post introductoria y desarrollar cada herramienta terapéutica un poquito más en nuevos posts.

      De nuevo, gracias por tus comentarios. Te esperamos por aquí.

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  2. Hola, soy un chico con espasticidad y os puedo asegurar que duele. He de decir que no siempre a sido el mismo dolor, digamos que antes era molestia que se podia llevar sin ningun problema pero ahora esa molestia se ha convertido en dolor. Dolor las 24 horas del dia,los 365 dias del años. Cierto es que ahora me estoy infiltrando con Toxina Botulinica y la verdad es que ayuda, pero no me quita el dolor del todo. Digamos que me ayuda mucho a la hora de poder caminar mas relajado respecto a la espasticidad. Pero los dolores de los musculos tensos como piedras siguen ahi y eso, que yo sepa, de momento nadie me ha dicho como quitar ese dolor. Asi que si alguien sabe, por favor, que me lo haga saber. Un saludo

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    • Efectivamente, una fractura puede actuar como espina irritativa y aumentar la espasticidad y/o espasmos en una persona con lesión medular (completa o incompleta). Otras circunstancias agudas que pueden exacerbar la espasticidad pueden ser: ulceras por presión, heridas, infección de orina, distensión de vísceras huecas, estréss emocional etc.
      Esperamos haberte ayudado.
      Un saludo del equipo de IRENEA

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  3. Hola,buenas tardes: mi hijo sufrió un TEC grave,y están pensando en realizarle un tratamiento con botox. Lei el blog y es muy interesante. Mi consulta es la siguiente: q efectos negativos hay en este tratamiento,q riesgos hay,pues como bien leí, es una toxina. Espero sus respuestas. Gracias.

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    • Buenos días. La toxina botulínica adecuadamente administrada se considera un fármaco eficaz y seguro, pero como cualquier medicamento, no está exento de riesgos. A nivel local puede causar dolor, hematoma o infección en el punto de inyección, en la gran mayoría de casos sin ninguna importancia. Puede provocar un cuadro pseudogripal al dia siguiente, con un poco de malestar o congestión, que tampoco tiene porque tener ninguna relevancia. Si se sobrepasa la dosis adecuada, se infiltran músculos no indicados, o el fármaco difunde en exceso, puede provocar una debilidad o pérdida de fuerza excesiva, que se recupera a medida que pierde efecto la toxina. Y dependiendo de la localización puede haber efectos secundarios más específicos, por ejemplo posible disfagia si se infiltra la musculatura del cuello o otros. Tu médico es el que te explicará los efectos secundarios en general y los que pueden aparecer en el caso concreto de tu hijo. Te deseamos que vaya todo lo mejor posible. Un saludo.

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  4. Buenas tardes. Leo todo lo relativo a espasticidad por internet. Yo tuve una caída en bici de cabeza con rotura de c3 y daño medular. Mi primera sensación fue de cuerpo totalmente dormido de cuello hacia abajo…. A lo que vamos… Espasticidad. Es la secuela que tantos sufrimos. Conseguí ponerme de pie y ser más o menos independiente, si bien hay recaídas. Hay semanas con menos espasticidad y otras con más. La espasticidad cuando me aprieta mucho me produce dolor articular que consigo paliar estirando, relajandome. Hasta ahora no he tenido que tomar nada para el dolor, si bien, tomo Lioresal y Sirdalud cada día. Espero sirva de ayuda.

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