La importancia del entorno en la neurorrehabilitación

Desde IRENEA damos una gran importancia al entorno en la neurorrehabilitación. Para nosotros no se trata de un ambiente más de trabajo, sino del espacio en el que profesionales y pacientes pasan muchas horas destinadas a su recuperación o tratamiento neurorrehabilitador. Por ello, hoy queremos incidir en este tema, en la importancia del entorno y, en concreto, cuál es nuestra visión en nuestros centros.

El entorno en neurorrehabilitación: definición, importancia y factores clave

Ambiente según la CIF: barreras y facilitadores

En primer lugar, para centrar el tema, sería interesante definir lo que entendemos por el entorno en la neurorrehabilitación, también llamado ambiente. En este caso, la CIF (Clasificación Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud) define los factores ambientales de la siguiente manera: “los factores ambientales constituyen el ambiente físico, social y actitudinal en el que las personas viven y conducen sus vidas”.
Además, podemos clasificar estos factores en barreras o facilitadores teniendo en cuenta sus características y las de la propia persona. Así, hay diferentes razones que hacen que un factor ambiental pueda ser considerado un facilitador o una barrera, y que define en qué grado lo es.
Con respecto a los facilitadores, debemos tener presente aspectos como la accesibilidad de un recurso, y si esa accesibilidad es constante o variable, de buena o mala calidad…
En el caso de barreras, puede ser interesante valorar con qué frecuencia un factor constituye un estorbo para la persona, si el obstáculo es grande o pequeño, y si puede o no evitarlo. También hay que tener en cuenta que un factor ambiental puede ser una barrera tanto por su presencia (por ejemplo, actitudes negativas hacia las personas con discapacidad) como por su ausencia (por ejemplo, no disponer de un servicio necesario).
Los efectos que tienen los factores ambientales sobre la vida de las personas con condiciones de salud son variados y complejos.

Ambiente según otros modelos

El Modelo de Ocupación Humana (MOHO) define el ambiente como “las características particulares del contexto personal físicas y sociales, económicas y políticas que impactan en la volición, organización y desempeño ocupacional”. Es importante aclarar que este modelo conceptualiza la volición. En concreto, explica que “la volición o motivación por el hacer se manifiesta a través de la causalidad personal (sentido de eficacia personal), los valores (sentido de importancia / significancia) e intereses (sentido de placer)”.
El ambiente ofrece demandas y pone restricciones para nuestras acciones. Juntos, estos dos conceptos explican el impacto ambiental o la oportunidad de apoyo, así como las demandas o restricciones que el ambiente tiene en una persona en particular.
Las características del ambiente crean un contexto significativo en el que las personas pueden desempeñar ocupaciones deseadas.
Éstas incluyen:

  • Espacios (contextos físicos que son limitados y organizados)
  • Objetos (cosas naturales o fabricadas con lo que las personas interactúan)
  • Tareas (secuencias de acciones convencionales que son coherentes, orientadas a un propósito, sostenidas en el conocimiento colectivo, reconocibles culturalmente y nombradas).
  • Grupos sociales (grupos de personas que se reúnen por varios propósitos, ya sean formales o informales).

Valoración del entorno y de su impacto sobre sobre la rehabilitación

Debido a la importancia del entorno sobre la persona (especialmente si se trata de personas con discapacidad) y sobre su rehabilitación, existen escalas de valoración. Éstas, ayudan a los profesionales a valorar en qué medida el ambiente o entorno supone una barrera o un facilitador en el desempeño ocupacional de nuestros pacientes.
Una de estas escalas, es la REIS (Escala de Impacto Ambiental Residencial) que evalúa los siguientes aspectos:
Espacios cotidianos:

  • Accesibilidad cotidianos
  • Adecuación del espacio
  • Cualidades hogareñas
  • Características sensoriales
  • Apoyos visuales

Objetos cotidianos:

  • Disponibilidad de los objetos
  • Adecuación de los objetos
  • Cualidades hogareñas
  • Atributos físicos de los objetos
  • Diversidad de objetos

Facilitación de las relaciones:

  • Disponibilidad de los otros
  • Facilitación del respeto
  • Apoyo y facilitación
  • Entrega de información
  • Empoderamiento

Estructura de las actividades:

  • Demandas de la actividades
  • Demandas del tiempo
  • Atracción de las actividades
  • Rutinas
  • Toma de decisiones

Post realizado por el departamento de Terapia Ocupacional del Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima, Vigo.
Bibliografía:
– Organización Mundial de la Salud. Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Secretaría de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad. Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO); 2001 [consultado 17 Jun 2019]. Disponible en: https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/43360/9241545445_spa.pdf;sequence=1
– University of Illinois Board of Trustees. 2019 [consultado 16 Jun 2019]. Disponible en: https://www.moho.uic.edu/default.aspx
– Kielhofner G. Modelo de Ocupación Humana. Teoría y aplicación. 4ª Ed. Editorial Médica Panamericana; 2011.

CompÁrtelo:
Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn

Deja un comentario

Quizás te interese TAMBIÉN